La semana pasada hicimos la visita a la casita del Ratón Pérez en Madrid y hoy se le comienza a mover un diente a Candela. Ella quiere que todo esté perfecto para cuando venga el ratoncillo, así que se nos ocurre hacerle una casita para recibirlo y dejarle un poco de queso dentro para que pueda descansar.
Los materiales necesarios para nuestra casita son sencillos, una caja de cartón de forma cuadrada, tijeras, celo y un cartón para el tejado. Nosotras, más bien yo, estaba haciendo limpieza y hemos encontrado la caja de cartón perfecta, así que manos a la obra, yo sigo con mi limpieza y le voy dando a ella para que recorte siguiendo mis instrucciones, luego lo mejoro un poco y ya está.
En primer lugar recortamos las solapas laterales y ya tenemos una puerta que se abre de abajo a arriba.
El tejado es fácil, doblamos el cartón por la mitad para conseguir un triángulo encima de nuestra caja, con celo pegamos cada lateral del tejado por dentro y por fuera, hay que pegarlo bien porque si no se nos caerá.
Vamos a hacerle una escalera, con uno de los trozos de las solapas o del cartón del tejado, dibujamos los peldaños y recortamos la parte interior. El recortar los cuadrados interiores lo hice yo, la primera versión que intentó recortar Candela fue un poco desastre, es difícil aún para ellos.
Ahora le ponemos la chimenea, a Candela se le ocurre dibujarle humo, por la línea negra doblaremos y adaptaremos a la inclinación del tejado y pegaremos con celo.
Ya tenemos nuestra casita terminada.
Ya tenemos nuestra casita terminada.
Hemos pensado en hacer un poco de comida para los animales con los que estamos jugando, así que en los cartones que nos han sobrado le dibujo las formas de tomates, plátanos, ciruelas… y Candela las pinta.
Nos quedan pendientes muchas cositas para nuestra casa, una ventana, empapelar las paredes con dibujos, una cama para el ratoncito… en la siguiente limpieza seguiremos mejorándola.
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