Al contrario que al resto de la humanidad declaro
abiertamente que me gustan los hospitales.
Ese olor que aterra a mi madre, a mí me trasporta al
momento mismo en que yo era un bebé en su vientre. A salvo, cálida,
segura, acogida.
Buscan el origen de mi dolencia desde hace meses. Visito
especialistas como en un gran juego de la oca en el que volviera a comenzar una
y otra vez.
Neurólogo: Jaime Mateo